¿Qué puedes cultivar en una alameda?
Los álamos son árboles de climas húmedos, capaces de soportar climas subtropicales, por lo que flores, frutos y arbustos que compartan temperaturas medias y no muy bajas, pueden ser plantados en las cercanías de esta especie de árbol. Sin embargo, todo esto dependerá de tu ubicación geográfica y del espacio que tengas a tu disposición cultivar. Generalmente, y como mencionamos en líneas superiores, la siembra de almez, olmo, tilo, roble, morera entre otros, son los árboles que más convienen a la hora de ser insertados en suelos de alto riesgo para darle vitalidad y firmeza al sustrato.
Solo recuerda, que si estás al mando de un proyecto paisajístico que requiere de una gran cantidad de estos árboles con fines ornamentales, asegúrate de que cuenten con las condiciones ambientales o climatológicas necesarias para crecer y mantenerse saludables durante un largo tiempo, ya que como pudiste leer en nuestro apartado de álamos, existen algunos árboles que crecen de forma más lenta en suelos húmedos.
¿Madera de álamo y cultivo de árboles: parte de la jardinería?
Las personas que deciden integrar alamedas a sus espacios, deben entender que es un proceso que toma alrededor de un año a dos en completarse definitivamente. ¿Por qué? Debido a que la mayoría de los árboles que se disponen o son utilizados para estos espacios, tardan alrededor de este tiempo en incrustarse en el suelo de forma sólida y comenzar a crecer.
En este sentido, es necesario que cómo supervisor o creativo en el diseño del paisaje, tomes esto en cuenta para evitar confusiones o malos entendidos con tus clientes, ya que debes observar al menos, durante tres meses, la evolución del jardín una vez finalizado mismo. De esta manera sabrás si las plantas y árboles dispuestos reaccionan de una manera favorable al entorno a los cual han sido adaptado.
Entendido esto debes comprender ahora que el hecho de que tengas álamos u otros tipos de árboles similares para producir madera debido al acelerado proceso de crecimiento que estos ofrecen, no significa que vas a monetizarlos, al menos si tu fin último es ornamental o estético.
Por ello, es aconsejable que tengas claro cuáles serán tus objetivos en el proyecto, ya que si buscas construir una alameda con el propósito de dedicar horas en ella, recuerda que no ganarás dinero a menos que decidas asumirla como un espacio remunerado, lo cual requiere de una detallada planificación y ejecución de todos los elementos que conformarán en última estancia, esta forma de ingreso.
Propiedades medicinales del álamo: ¿Existen?
El populus como también suele llamarse a este árbol, posee distintas propiedades medicinales que muy pocas veces conocemos.
Desde dificultades gastrointestinales, urinarias y circulatorias, hasta afecciones temporales como la fiebre, son algunos de los problemas que son capaces de tratar las ramas y hojas de este árbol dependiendo de su tipo.
El álamo también posee propiedades antiinflamatorias, siendo capaz de tratar afecciones de garganta, dolores de cabeza, lumbagos, reumatismos, artritis o dolores relacionados al nervio ciático a través de infusiones, las cuales, al ser preparadas con su corteza u obteniendo sus yermas o brotes una vez alcanza su etapa adulta, son bastantes eficaces para este tipo de dolencias.
Por otro lado, sus hojas tienen propiedades cicatrizantes y desinfectantes, por los que es capaz de limpiar heridas que produzcan picor y ardor. Aunado a ello, la maceración de estas, ayudan a la hora de tratar golpes o contusiones, y si se combinan con las flores del árbol, funcionan como un expectorante durante la gripe, así como para mejorar congestiones nasales, sinusitis, o resfriados comunes cuando se es inhalado su vapor.
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